El pasado 26 de marzo fue el último día que José Antonio acudió a su puesto de trabajo como conserje del CEIP Claudio Sánchez Albornoz.
José Antonio fue contratado como relevista para sustituir una pre-jubilación. Esta se convirtió en jubilación a finales del mes de marzo, primeros de Abril de este año 2015, lo que arrastró a José Antonio finalizar su contrato. Esto no sería causa de mención, si no fuera porque el contrato de José Antonio era del 100%. Es decir con las mismas condiciones que cualquier contrato. 22 días hábiles de vacaciones y jornada laboral completa. Según nos informan las organizaciones sindicales consultadas, el hecho de tener un contrato de sustitución al 100% convierte este en un OEP (hasta oposición) al llegar la jubilación del sustituido. El argumento que esgrime el Ayuntamiento para no haber procedido a hacer a José Antonio un contrato de OEP es, que actualmente no se puede contratar. Este argumento no se sostiene puesto que no hablamos de una nueva contratación, sino la conversión de un contrato a otro.
De esta manera, José Antonio, se suma a los más de 130 trabajadores y trabajadoras despedidos por el actual equipo de Gobierno.
Desde el momento en que se supo que José Antonio iba a ser despedido, tanto la dirección del colegio como el AMPA del mismo se movilizaron. Recogiendo 1.314 firmas que pasaron por registro a la vez que solicitaron una reunión con el Alcalde David Pérez. Este hecho se produjo el pasado 2 de Febrero. Ante la falta de respuesta por parte del Alcalde, el pasado 11 de marzo reiteraron su petición mediante otro escrito, el cuál obtuvo la misma respuesta que la anterior, es decir ninguna.
Decir que José Antonio, a parte de ser padre de familia con 3 niños, es un profesional que empatizaba con los niños del colegio , siendo muy querido por estos. Prueba de ello es la tristeza que se vivió el 26 de marzo cuando se despidió de los que haían sido "sus niños". Ver a esos niños y niñas llorando desconsolados al despedirse de José Antonio dejan a las claras que era para estos niños algo más que un mero conserje. Era un amigo. Pero no solo con los niño/as, también padres, madres, dirección y profesorado, estaban encantados y hablan maravillas de José Antonio.
Ante semejante panorama desolador, el Ayuntamiento tiró de "sensibilidad y humanidad" y durante dos días puso un "sustituto" a media jornada. Media jornada que no comprende la apertura del colegio. Ese "honor" se lo dejan a la directora o profesorado que sea merecedor/a de semejante privilegio.
Desgraciadamente no es el primer colegio público de Alcorcón que se ve envuelto en semejante despropósito. El año pasado, colegios públicos como el Clara Campoamor y Parque Lisboa, lo sufrieron. El resultado fue el mismo que en este caso. Trabajadore/as despedido/as y colegios públicos que pierden sus conserjes.
Conviene recordar a este Equipo de Gobierno, que la figura del conserje de colegios de primaria, sin ser determinante en la educación de los niño/as, si es una pieza fundamental en el desarrollo y rutina de estos. Una persona con empatía y entendimiento con los más pequeños, con padres, madres y órganos educativos, es una pieza imprescindible que completa el puzzle educativo.
Cuando se encuentra un profesional vocacional de estas características, conviene conservarlo (porque aunque no se lo parezca, no todo el mundo cumple con esta característica). Máxime cuando se puede. El problema viene cuando no se quiere.
José Antonio si la cumple y este Equipo de Gobierno no ha querido.
"Señor Emilio Casado, Concejal de Educación, su responsabilidad es defender su concejalía con todas sus fuerzas y no consentir que estas cosas pasen. No vale con decir..."
¡NO PUEDO HACER NADA, NO TENGO COMPETENCIA!
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